Reemplazar parte de los volúmenes que se reciben por vía marítima y posterior camión, por transporte ferroviario. Actualmente ya hay un volumen de chatarra que llega por vía marítima con origen Lyon, y dotando a la terminal ferroviaria con ancho de vía internacional, podría ser transportado en su totalidad por un tren desde Lyon directamente, contribuyendo a la mitigación del impacto climático y a la competitividad de la propia empresa (se estiman ahorros por tonelada transportada).

Aumentar la capacidad y flexibilidad en los apartaderos para captar tráfico que actualmente se realiza vía carretera (tanto a nivel nacional como internacional) y su cambio a transporte por tren hasta capacidad máxima, tanto de entrada como de salida de la factoría.

Mitigar el cuello de botella actual asociado al transbordo de la mercancía de CELSA que se debe hacer en la terminal de Port-Bou para cambio a trenes con ancho internacional para su paso a Francia y otros países europeos, coste tanto de operativa como pudiesen ser los relacionados con la mejora de tiempos de tránsito origen-destino de la mercancía